sábado, 21 de noviembre de 2009

Cambios, cambios...

Hola: blogusino mañanero habemus...

Aprovechando que hoy me he levantado algo resacosa y que (¡oh, dioses!) la conexión parece que funciona, he decidido arreglar un poquito el cajón del desastre.

He quitado a "mis admiradores", no porque no los quiera, sino porque ya había dicho que iba a dejarlo durante un tiempo determinado.

He añadido el blog de Paula, una encantadora mujer de quien he oído hablar durante años y ayer, por fin, pude conocer. Pena no haberla conocido antes, pero más vale tarde que nunca.

He quitado alguno que ya no sigo.

He quitado la lista de temas porque la tengo que arreglar, es demasiado errática incluso para mí.

Y, para aprovechar, os comento que hasta final de mes en Madrid se celebra Un Madrid de cuento, donde cuenteros y narradores de todo el mundo vienen a embelesarnos.

No es necesario haberse leído a Propp y todos los teóricos para saber la importancia de la narración oral. Y me estoy refiriendo a los adultos, porque siempre pensamos en los niños (pobrecitos, abducidos por Disney). Casi lo habíamos perdido, pero desde hace algún tiempo podemos disfrutar de contadas en bares, en bibliotecas, en museos. Dejaos arrastrar por la magia de una voz modulada que os puede dar miedo, o gusto, o simplemente hacer pensar un poquito, que tampoco viene mal.

El blogusino-escoba viene otro día...

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Cinco semanas... de globo

Hola: sólo deciros que este parón no ha sido producto de vaguería supina.

Resulta que mi conexión en casa es mala y cuando intentaba acceder para dejar esas perlas de sabiduría que me caracterizan, no me dejaba, pretextando no sé qué de saturación de líneas o bla bla bla. Tampoco me dejaba mirar los blogs de Cefaleas o de Manolo Cortés. Y no es cuestión de ponerse a escribir blogusinos en el trabajo, ¿no?

El caso es que tenía unos cuantos bonitos "parlamentos" sobre
Lulu, Clementina y, para irnos a lo más actual, los espectáculos de Israel Galván y de Pina Bausch en el Festival de Otoño. Y el concierto de Mitsuko Uchida. No sé si contarlo en una especie de blogusino escoba otro día, que hoy es muy tarde.

Aparte, llevo tres semanas como loca, con un montón de asuntos pendientes que se van resolviendo poco a poco.

Bueno, que he vuelto, espero que mi línea no me haga esta jugada otra vez...