martes, 2 de diciembre de 2008

Listas

No sé si alguien ha leído High fidelity, de Nick Hornby. Me divirtió mucho, como también lo pasé estupendamente con la película que se hizo sobre la novela. Recuerdo esa obsesión por hacer listas que tiene el protagonista y las músicas que llenan tanto el libro como la película (con cameo incluido de Bruce Springsteen).

Listas: no sé si alguien se ha parado a pensar en que nos pasamos la vida haciendo listas, clasificaciones, ordenando... Dando sentido a la vida.
Los bibliotecarios nos servimos de listas casi para todo, y no digamos aquellos que han hecho la carrera de Historia: la lista de los Reyes godos, de los emperadores romanos, las siete maravillas, etc. Vamos, me toca por todas partes.

Hace unos meses, un amigo me pidió que hiciera una lista de obras de literatura española. Imaginad, lo que
yo considero que se debe leer. Me dió más de un quebradero de cabeza (¿cómo no poner esto o aquello?), y lo dejé en una cincuentena, no sólo por esa responsabilidad de seleccionar algo así como un canon, sino porque sabía que iba a comprarlas de un tirón para hacer su biblioteca de literatura española. Quité el Quijote, el Lazarillo y algún otro porque ya los había leído... ¡Y me regañó porque me había quedado corta para lo que él quería! Por cierto, que decidí pasar bastante de lo que está establecido como imprescindible, e hice una lista arbitraria a más no poder, fundamentalmente con lo que me ha ido gustando, aparte de un poquito de variedad cronológica y de género (literario).

Voy a hacer un ejercicio como el protagonista de High Fidelity y escribo una lista de los libros que he leído este año. Habitualmente leo una docena, más o menos. Reconozco que no es mucho (bueno, en España sí es bastante), pero mi espalda está resentida y no me compensa el peso para los 20-40 minutos que le puedo dedicar entre ir de casa al trabajo y viceversa. Además, yo necesito algo parecido a la concentración para leer a gusto.

Ahí va la lista:
Windladh, Lisa. Segura y sabrosa. Un libro sobre comida en Suecia, con recetas.
Grimod de la Reynière, B.A. Manual de anfitriones y guía de golosos. Una recopilación de artículos gastronómicos de un francés que vivió entre finales del siglo XVIII y el XIX.
Savage, Sam. Firmin. Una novelita sobre una rata bibliófaga y algo más...
Lemebel, Pedro. Tengo miedo torero. Una novela ambientada en el Chile de Pinochet.
Aregue, Gonzalo. Los ratones ciegos. Otra novela ambientada en Hispanoamérica y España.
Hornby, Nick. Fever pitch. Un casi ensayo sobre el fútbol inglés hasta 1992.
Anónimo. Libro de Sent Soví. Un recetario catalán de cocina de la Edad Media.
Bennet, Alan. The uncommon reader. Una novelita que ya recomendé en otra entrada.
Ben Jelloun, Tahar. Partir. Una novela dura, pero interesante, sobre la inmigración marroquí a España.
Naudé, Gabriel. Recomendaciones para crear una biblioteca. Es un clásico del siglo XVII, y la edición que estoy manejando es estupenda.

Como se puede apreciar, me gusta leer sobre cocina, algunos clásicos y a Nick Hornby. Algún libro está pendiente de terminar, como un tratado de cocina del Renacimiento (otro clásico), un volumen estupendo de Peter Burke sobre el Renacimiento y un libro de Alain Mabanckou, Verre cassé.

Ninguno de los libros de este año me ha decepcionado, algunos me han gustado más y otros menos... Reconozco que la lectura de recetarios tal cual es bastante árida (¿qué diferencia un recetario de una guía de teléfonos? Mas bien poco, salvo que te permite soñar con guisos sabrosos), pero igualmente los recomiendo.

PS: El comentario de Magdalena tiene razón: se me ha olvidado el libro de Reynaud, Stéphane Cerdo e hijos. Un volumen sobre la vida de la gente que vive del ganado porcino en Francia. Muy ilustrado y con recetas sabrosas.

1 comentario:

Unknown dijo...

Me sorprende pensar que he podido leer más libros que tú. 12 libros es muy poco para ti... "Mira en tu corazón..." Yo creo que has leído más, sobre todo recetarios, a saber: Cerdo e hijos, el del cocinero del papa Pío V, y seguro que alguna cosa más. No me habías comentado nada de los libros chilenos, ¿están bien?